Preparan una película sobre Bin Laden

Promete ser uno de los filmes más polémicos de los próximos tiempos. No sólo porque su protagonista será el hombre más buscado del planeta, sino porque el mundo está todavía muy revuelto y con muchas heridas abiertas.

"Al Qaida", la nueva película que preparan los estudios cairotas Good News for Film and Music no pasará inadvertida ya que será, según sus creadores, la primera versión procedente del mundo árabe que llevará a las pantallas al grupo terrorista. Su director y presidente de la productora, el egipcio Adel Adeeb, promete repartir a diestro y siniestro para mostrar una visión lo más honesta posible de Al Qaida, "sin caer en prejuicios o esgrimir ideas preconcebidas". Y repite, sin dejar lugar a malas interpretaciones, que "dos no pelean si uno no quiere", por lo que no se puede responsabilizar sólo al mundo árabe del fenómeno Al Qaida.

"EE.UU. ha creado a su propio monstruo -señala convencido-. Formó militarmente en su día a Bin Laden y le vendió las armas, y ésa es una parte de la historia que debe conocerse", sentencia el director, que adelanta que el filme "mostrará acontecimientos que el gran público no sabe".

El argumento de la película está, desgraciadamente, muy de actualidad: un periodista americano es secuestrado por Al Qaida y llevado ante el líder de este grupo terrorista, Osama bin Laden y su "número dos", Ayman al-Zawahiri. "Estos personajes quieren que el reportero explique su historia al mundo occidental, desde sus orígenes hasta lo que son hoy en día -explica Adeeb- pero en la película veremos que lo que soñaron en sus comienzos no es lo que finalmente sucedió". Los sueños rotos no nos mostrarán, sin embargo, a un Bin Laden arrepentido. "Cuando alguien cree realmente en algo no se arrepiente de nada. ¿Acaso Bush está arrepentido de la guerra de Irak?", arremete el director. "Políticamente, ni siquiera creo que pueda".

Adeeb dice que el conocimiento mutuo de Oriente y Occidente es muy limitado. "Aquí se piensa que en América y Europa todo es porno, dinero y pistolas, y allí que Oriente es un gran desierto, con mujeres con velo, camellos y terroristas. Es ridículo".

La producción de Good News espera arrojar un poco de luz a este despropósito. "Queremos hacer una película sobre la comunicación, sobre seres humanos, que nos ayude a comprender qué sucedió, qué está sucediendo, y qué sucederá", explica el director.