80 edición de los Oscar

La lista definitiva de los ganadores de la 80 edición de los Oscar es la siguiente:

Mejor película: "No es país para viejos" (Miramax and Paramount Vantage).
Mejor director: Joel Coen y Ethan Coen (No es país para viejos).
Mejor actor: Daniel Day-Lewis (Pozos de ambición).
Mejor actor de reparto: Javier Bardem (No es país para viejos).
Mejor actriz: Marion Cotillard (La Vida en Rosa).
Mejor actriz de reparto: Tilda Swinton (Michael Clayton).
Mejor guión adaptado: Joel Coen y Ethan Coen (No es país para viejos).
Mejor guión original: Diablo Cody (Juno).
Mejor película de animación: "Ratatouille" (Disney).
Mejor dirección artística: Dante Ferreti y Francesca Lo Schiavo (Sweeney Todd. El barbero demoníaco de la calle Fleet).
Mejor fotografía: Robert Elswit (Pozos de ambición).
Mejor vestuario: Alexandra Byrne (Elizabeth: la Edad de Oro).
Mejor documental: "Taxi to the Dark Side".
Mejor corto documental: "Freeheld".
Mejor montaje: Christopher Rouse (El Ultimátum de Bourne).
Mejor película en lengua extranjera: "Los Falsificadores" (Austria).
Mejor maquillaje: Didier Lavergne y Jan Archibald (La Vida en Rosa).
Mejor banda original: Dario Marianelli (Expiación).
Mejor canción original: "Falling Slowly" de la película "Once".
Mejor corto animado: "Peter & the Wolf".
Mejor corto: "Le Mozart des Pickpockets".
Mejor montaje de sonido: Karen Baker Landers y Per Hallberg (El Ultimátum de Bourne).
Mejor mezcla de sonido: Scott Millan, David Parker and Kirk Francis (El Ultimátum de Bourne).

La gala de la 80 edición de los Oscar se recordará por sus resultados pero no por sí misma. La alegría del premio de Javier Bardem y la rotunda victoria de la película que le ha abierto las puertas de Hollywood, 'No es país para viejos' de los hermanos Coen, marcan el recuerdo de una ceremonia aburrida, jalonada por muy prescindibles números musicales.

La gala arrancaba con imágenes de un montaje futurista en el que aparecían estrellas del celuloide del pasado y de la actualidad, que dio paso al presentador y humorista Jon Stewart, quien celebró que el final de la huelga de guionistas haya permitido la celebración de la ceremonia. El presentador dijo que una buena forma de homenajear a los guionistas sería invitarlos a la fiesta posterior a la gala que tradicionalmente celebra Vanity Fair, y que este año ha sido cancelada. Afirmó, con humor, la celebración sanguinaria que este año se hace con películas nominadas como 'No es país para viejos', en que el personaje de Javier Bardem es un asesino despiadado, o con 'Pozos de ambición'. "¿Qué pasa, que el público de esta ciudad necesita un fuerte abrazo? Doy gracias a Dios por los embarazos juveniles", apuntó, en referencia a 'Juno' y la violencia del resto de películas. Por contra, se mostró satisfecho por el contenido de 'Expiación', "por fin una película que refleja la sexualidad del Yon Kipur (tradicional fiesta judía)". Tras hacer varios chistes políticos sobre Hillary Clinton y Obama y sobre algunos de los asistentes, aseguró que la Academia muchas veces "ignora a películas que no son demasiado buenas".

La alfombra roja que conduce al teatro Kodak de Los Ángeles estuvo repleta de belleza, glamour y líneas sencillas en los trajes de las actrices y los esmoquines negros de los caballeros. Los modistos Christian Dior, Marchesa, Roberto Cavalli, Giorgio Armani, el recientemente retirado Valentino o John Galliano fueron los elegidos por los rostros más conocidos del firmamento del cine. El rojo y el negro fueron los colores más lucidos por las estrellas. En cuanto a las joyas fueron deslumbrantes, en especial los espectaculares pendientes escogidos por las actrices, todos con enormes diamantes. Y es que, tal y como señaló John Travolta a la entrada del teatro Kodak, "esto es una noche para ellas". Según su esposa, la también actriz Kelly Preston, vestida con un traje naranja de Roberto Cavalli, "la noche de los Oscar es para que podamos ponernos nuestras mejores galas con los trajes que nos prestan".

Otra extranjera que ha marcado un hito ha sido Cotillard, que por encarnar el destino trágico de la cantante francesa Edith Piaf en "La Vie en Rose", se ha convertido en la segunda francesa en alzarse con la estatuilla dorada, 48 años después de Simone Signoret, y en la segunda mujer en ganar el premio por una actuación en un idioma que no es el inglés, después que Sophia Loren lo lograra en 1962.

Por su parte, Daniel Day-Lewis se alzó con su premio a Mejor Actor por meterse en la piel de un desalmado hombre de petróleo en "There will be blood", que le ha valido su segunda estatuilla después de ganar la primera por "Mi pie izquierdo" en el año 1990.

El habitual montaje de imágenes de los hombres y mujeres del cine concluyó con la de Heath Ledger, quien murió el mes pasado a los 28 años, de una sobredosis accidental de medicamentos. Y aunque la gala fue bastante aburrida en sí, como casi siempre, nos quedaremos con algunos de los puntillosos comentarios que lanzó el presentador Stewart al respetable: 'El Óscar cumple este año 80 años, por lo que es el candidato ideal para el Partido Republicano'. 'Si un negro o una mujer van a ser presidentes de Estados Unidos eso quiere decir que un asteroide está a punto de impactar contra la Tierra', en alusión a los demócratas Barack Obama y Hillary Clinton. Las actrices embarazadas también fueron objeto de la ironía de Stewart quien decidió entregar el Óscar al Mejor Bebé. Yl legendario Jack Nicholson no se escapó tampoco de las bromas de Stewart, quien hizo constante referencia a su fama de ligón.

Poco más.