La fila de los mancos

El mundo del séptimo arte: noticias, anécdotas, biografías (actores, directores,...),..., y, cómo no, los últimos estrenos cinematográficos.


Google




jueves, noviembre 23, 2006

¿Es hora de que los alemanes se rían de Adolf Hitler?

La comedia que rompe los tabúes alemanes retratando a Adolf Hitler como alguien que moja la cama y con problemas de erección está diseñada para seducir a un público que ha crecido aburrido por las serias películas sobre el dictador nazi, ha dicho este martes el director de la cinta.
Dani Levy, director judío nacido en Suiza, asegura en una entrevista con Reuters después de un pase ante la prensa de su comedia "My Fuehrer. The truly truest truth about Adolf Hitler", que está preparado para fuertes reacciones. "Es una película muy arriesgada, no es una cinta que después de hacerla sepas la reacción que va a tener", dice Levy del filme, que se estrenará en enero en un país donde burlarse de Hitler es visto como algo inmoral. "Imagino que habrá fuertes reacciones en Israel, Estados Unidos y en todo el mundo por las bromas sobre los judíos. ¿Y como reaccionarán los neonazis? Pero no tengo miedo", dice Levy, que también ha escrito el guión, que mezcla comedia y tragedia en un caleidoscopio de emociones.
La película es la historia ficticia de un instructor de actores, llamado profesor Adolf Gruenbaum, que en diciembre de 1944 es sacado de un campo de concentración para entrenar a Hitler, que está solo y desanimado por la guerra, para el importante discurso de año nuevo. Hitler está teniendo un mal día. Su estilista le cortó accidentalmente la mitad de su característico bigote y se ha quedado afónico gritándole. Además ha mojado su pijama, ha perdido su confianza y sufre su humillación por su fallo en la cama con Eva Braun.
El martes, en un pase del filme que aún esta en postproducción había una desbordante cantidad de periodistas, muchos sentados en el pasillo. Mientras que unos se rieron durante los 90 minutos que duró, otros ni siquiera sonrieron.
Levy, de 48 años, ha hecho carrera en Alemania destruyendo tabúes. En 2005 se hizo con la taquilla con la comedia "Go for Zucker: An Unorthodox Comedy", en la que se burlaba de la vida de un judío moderno en el país germano, donde aún perdura el sentimiento de culpa por el Holocausto. Además añadía que los alemanes necesitan tener una nueva visión de Hitler, porque han sido insensibilizados por películas serias, documentales y libros de texto. Convertir al mayor demonio de la historia alemana en una figura cómica funcionó fuera del país con filmes como "El gran dictador", de Charles Chaplin, o "La vida es bella", de Roberto Benigni. ¿Pero están los alemanes preparados para reírse con chistes sobre Hitler y los judíos? "Creo que es necesario algo distinto a las películas educativas de los últimos 30 o 40 años", dice Levy, cuya película también se ríe de los dramas y documentales muy vistos sobre el dictador y sus esbirros. "La comedia es una buena forma de conmover sus emociones y provocarlos. Se reirán y entonces se sorprenderán por reírse". En una escena, el jefe de propaganda Joseph Goebbels intenta convencer al inicialmente reticente Gruenbaum para que acepte el trabajo. "Oh, por favor, no te tomes ese asunto de la solución final como algo personal", le dice.