Jane muere olvidada en un asilo

Brenda Joyce, la actriz que quedó en la historia del cine como “Jane” en cinco películas de la saga Tarzán, murió a los 92 años en un asilo de Santa Monica, en California, Estados Undios este pasado 4 de julio, aunque la noticia no se ha dado a conocer hasta hoy.

Joyce, cuyo verdadero nombre era Betty Leabo, comenzó su carrera en los años 40 en películas clase B de Hollywood, hasta que fue elegida para reemplazar a Maureen O’Sullivan en el papel de Jane, la novia del “rey de los monos”, que entonces interpretaba el actor Johnny Weissmuler.

Había sido descubierta de casualidad, mientras trabajaba como modelo fotográfica para pagar sus estudios en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). En 1939, directivos de la 20th Century Fox la descubrieron en la portada de una revista y la contrataron.

Participó en cinco películas, cuatro de ellas con Weissmuler y la última, “La Fuente Mágica”, de 1949, con Lex Barker en el papel de Tarzán.

Fue esta su última aparición en la pantalla grande, ya que ese año decidió abandonar la actuación, tras un escándalo que significó en ese momento el divorcio de su marido, el militar Owen Ward.

Ella se había casado con Ward en 1941 pero el matrimonio duró poco y se separaron apenas ocho años después. De la pareja nacieron tres hijos: Pamela Ann, Timothy Owen y Beth Victoria.

Además de abandonar la pantalla se alejó de la vida pública para dedicarse de lleno a su familia, a la jardinería (uno de sus hobbies preferidos) y a un grupo que se encargaba de ayudar a los inmigrantes que llegaban a los Estados Unidos.