La fila de los mancos

El mundo del séptimo arte: noticias, anécdotas, biografías (actores, directores,...),..., y, cómo no, los últimos estrenos cinematográficos.


Google




martes, enero 23, 2007

Así se alquilarán las películas en la era de internet

A los tradicionales video clubes se sumaron hace poco aquellos que hacen entrega de películas. Pero el crecimiento de las conexiones de banda ancha y la demandada comodidad traen una nueva tendencia.
Nada hace pensar que quienes deseen ver una película deban acercarse hacia el videoclub más cercano, ver si el título no está alquilado, hacer la cola para pagar y finalmente retirarse hacia su hogar. Tampoco evidentemente se deberá esperar a la entrega de películas, un servicio que crece a pasos agigantados debido a la comodidad que brinda. Pero no, en poco tiempo unos pocos clicks serán suficientes para disfrutar de una película o un capítulo de la serie favorita.
El nuevo servicio en línea de Netflix, la compañía que popularizó la entrega de DVD por correo postal, da un gran empujón a la entrega electrónica de películas por internet, la vía de distribución de videos del futuro. Netflix hizo, por fin, honor a su nombre cuando anunció un esperado servicio que permitirá a sus suscriptores descargar filmes y programas televisivos a sus computadoras personales a través de internet. El servicio, llamado "Watch Now" ("Véalo ahora"), supone que los clientes no tendrán que esperar a la llegada del correo para ver las películas o programas de televisión que alquilen, y permitirá acceder a los videos inmediatamente en el ordenador personal, sin costes adicionales. Los clientes que lo deseen podrán continuar recibiendo sus DVD por correo tradicional, pero también tendrán la opción de acceder a los cerca de mil títulos -una pequeña fracción de los más de 70.000 de que dispone el servicio por correo postal- si utilizan una tecnología que permite ver los programas prácticamente al mismo tiempo que se descargan en la computadora.
Netflix no es, por supuesto, la primera compañía en ofrecer un servicio de estas características. El gigante informático Apple y el del comercio electrónico Amazon llevan más de un año ofreciendo la entrega electrónica de productos audiovisuales, mientras que MovieLink o CinemaNow han convertido la visita al video club en una reliquia del pasado. Pero el tirón de Netflix y sus más de 6,3 millones de suscriptores -un 12 por ciento del mercado del alquiler de DVDs en EE.UU.- podría dar un empujón a una vía de distribución que todavía está en pañales. Al igual que sus competidores, la compañía de Los Gatos, en California, se enfrenta a importantes obstáculos de naturaleza tecnológica, como los problemas derivados de compatibilizar los formatos de internet para la televisión, la instalación del software para ver las películas o la necesidad de contar con una conexión a la red de alta velocidad. A esto se suma -y esta ha sido una de las principales críticas a Netflix- que sólo está disponible para los usuarios del sistema operativo "Windows", de Microsoft, con lo que quedan excluidos los usuarios de Apple (que probablemente, por otra parte, opten de todas maneras por su propia tienda online "iTunes"). También cuentan las trabas comerciales, principalmente los temores de los estudios cinematográficos a que la distribución por internet dé alas a la creciente piratería de películas y, sobre todo, el temor a aplastar sus propias vías de distribución. El propio Reed Hastings, presidente ejecutivo de Netflix, señala que la adopción universal de esta tecnología todavía tardará años en llegar, aunque insiste en que "éste es el momento adecuado para que Netflix de este primer paso".
"Llamamos a nuestra compañía Netflix en 1998 porque creíamos que el alquiler de videos en internet representaba el futuro", dice Reed. Netflix llevaba años planeando este servicio, que llega dos meses antes de que su gran rival Blockbuster lance su propio programa de alquiler online de películas. Todo esto previsiblemente recrudecerá la competencia entre ambas empresas, que no sólo se enfrentan en el mercado sino también en los tribunales: Netflix demandó a Blockbuster por infringir las patentes de su propiedad, es decir, copiar su rompedor modelo de negocio, mientras que Blockbuster hizo lo propio y acusó a su rival de violar las leyes que prohíben el comportamiento monopolístico. Sea como fuere, los resultados de estas iniciativas tardarán en hacerse notar, ya que tenemos DVD para rato. Como señaló el propio Hastings, el mercado de la distribución electrónica es "microscópico. El DVD continuará reinando durante mucho tiempo".